Siempre me llamó la atención la dificultad de Einstein de captar el descubrimiento freudiano, de ese universo interno que es el inconsciente, en contraste con su genio para explicar las leyes del Universo.
En 1928, Einstein se negó a respaldar
la candidatura de Freud para el Premio Nobel. Einstein sostuvo, según
el biógrafo Peter Gay, "que no se podía ofrecer ninguna opinión fiable
sobre la verdad de las enseñanzas de Freud".
Sin
embargo, con motivo del 80 aniversario Einstein le escribió: "No hace
mucho, tuve la oportunidad de escuchar acerca de algunos casos que en mi
juicio excluyen cualquier otra interpretación que la proporcionada por
la teoría de la represión".
Freud le respondió:
"Realmente debo decirle que estoy encantado de aprender del cambio en
sus juicios o por lo menos que haya dado un paso en esa dirección. Por
supuesto que siempre supe que me admiraba sólo por cortesía, y que
estaba convencido de que muy pocas de mis afirmaciones eran comprobables
científicamente. ¿No cree que debería haber sido mucho mejor tratado si
mis doctrinas hubiesen incorporado un mayor porcentaje de error y la
locura? Usted es mucho más jóven que yo, y puedo esperar que cuando
haya alcanzado mi edad se convierta en un discípulo mío. Como yo no
estaré aquí para aprender de esto, ahora estoy anticipando la
satisfacción".
Pablo Cúneo
Comentarios
Publicar un comentario